Lamentablemente, la contaminación de nuestro medio ambiente es un tema muy común hoy en día y si no tomamos acciones conjuntas, puede traer consecuencias devastadoras en los próximos años.
El plástico es uno de los materiales que mayor responsabilidad tiene en cuanto a la contaminación del medio ambiente; aparece hace aproximadamente 70 años, creando una dependencia debido a su bajo coste y a la variedad de uso que se le puede asignar desde entonces. Al ser un derivado del petróleo, no es un material natural y su descomposición puede llevar de 100 a 400 de años; al mismo tiempo que va contaminando al medio ambiente y sobre todo ahogando a nuestro planeta.
¿Sabes dónde termina el plástico?
Lamentablemente la mayoría del plástico termina no solo en la tierra, sino también en nuestros océanos, siendo éste el más afectado; causando daños irreparables en el ecosistema y en la fauna marina. Cada año llega un aproximado de 8 millones de toneladas al mar, convirtiendo este en un vertedero de desechos; y si no tomamos acciones responsables, para el año 2050 se estima que habrá la misma cantidad de plástico como peces en el mar. Triste pero cierto.
Este hecho está amenazando a una gran cantidad de especies, siendo entre las más perjudicadas las aves marinas, tortugas, focas, por mencionar algunas, ya que estás, pueden ya sea ingerir, enredarse o incluso hasta asfixiarse con el plástico.
Por estas y muchas otras razones cada 8 de Junio desde el año 2018 celebramos el Día Mundial del Océano, aprovechando que es el mes verde del año, ya que se celebra también el día medio ambiente. En este mes no solo se conciencia a la población a través de actividades, eventos y ferias alrededor del país, sino se celebra su grandeza por ser el pulmón del planeta.
Por otra parte, la incineración del plástico tampoco es la mejor solución, ya que contribuye a la contaminación también. Al pasar por éste proceso, desprende sustancias muy tóxicas que pueden causar enfermedades a medio y largo plazo.
Finalmente, la opción que debemos optar es el reciclado del mismo, convirtiendo el plástico en materia prima para la elaboración de otros productos; o simplemente dándole otros usos. Para esto, necesitamos que el gobierno y las empresas nos ayuden en buscar soluciones verdes para causar menor impacto en nuestro planeta para así crear una cultura eco amigable. De esta formada se podremos ir educándonos y concienciándonos a optar por estilos de vida más amigables con el ambiente.
Mientras tanto, Anímate e inspira a otros a dar grandes cambios con estas pequeñas acciones:
- Eliminar el uso de bolsas plásticas y remplazarlas por unas ecológicas o de tela.
- Evitar el uso de botellas plásticas. Usa nuestra botella de bambú.
- Evitar comer chicle, que, aunque no lo creas, ¡tiene plástico!
- Buscar otras alternativas para remplazar objetos de uso cotidiano: envases de vidrio, cepillos de dientes ecológicos, entre otros.